Si hablamos de Juan Manuel Fernández Montoya pocas personas caerán en la cuenta de que se está haciendo mención a uno de los más grandes bailores de flamenco dentro y fuera de nuestras fronteras. Farruquito es el nombre por el que se conoce al artista que más joven ha encarnado 'el duende' por los escenarios. Nacido en Sevilla en 1982, se considera bailaor desde el mismo momento en el que sus padres le concibieron. Su madre la bailaora Rosario Montoya Manzano, conocida como La Farruca, dice que sentía 'como bailaba el niño dentro de mi barriga', cuando por aquel entonces ella trabajaba en un tablao de Sevilla. Su padre era el cantaor Juan Fernández Flores, el Moreno, uno más al que añadir a la lista de antecesores de Farruquito que se remonta a su abuelo Farruco, el que fundó la escuela de la que él ahora hace gala.
Con sólo cinco años hizo su debut internacional en Broadway con el espectáculo 'Flamenco Puro' y ya a tan temprana edad su nombre aparecía en los carteles junto a los de su familia y a algunos de los más grandes del flamenco. Fernanda y Bernarda de Utrera, Adela la del Chaqueta, Güito, Manuela Carrasco o Angelita Vargas son los personajes que le marcaron desde aquella primera aparición y que resuenan todavía en lo más profundo de su memoria.
Su primera aparición no se quedó en una anécdota, a pesar de su extrema juventud la carrera de Farruquito empezaba a forjarse cada vez con más fuerza. A los ocho años la Sala Zambrana de Madrid acogió la primera temporada de un bailaor aún muy niño aunque sólo en apariencia porque en los escenarios ya era un experimentado profesional. De ello se habían percatado distintas personalidades del mundo de las artes escénicas y fílmicas lo que le sirvió para intervenir con 11 años en el video-clip 'Camarón nuestro' y con uno más en la película de Carlos Saura 'Flamenco' en la que taconeaba junto a su abuelo Farruco. La unión familiar del entorno de Farruquito va más allá de lo personal y se ha hecho patente en cada escenario. Así sucedió con el espectáculo 'Bodas de Gloria' en el que el bailaor participó a los doce años junto a toda su saga.
Farruquito solía acompañar a su abuelo en cada actuación, con él participó en la inauguración de las Paraolimpiadas de Barcelona y en el pabellón de Andalucía de la 'Expo 92' de Sevilla. Cinco años después, en 1997, fallecía Farruco lo que se sumó a la repentina muerte de su padre tres años más tarde. 'El Moreno' fue víctima de una dolencia cardiovascular en terribles circunstancias ya que la muerte subió a buscarle al escenario durante una gira por América mientras le cantaba a su hijo Farruquito. Estos hechos le arrebataron la adolescencia al bailaor que con 15 años se vio obligado a convertirse repentinamente en adulto para asumir el patriarcado del clan Montoya
